Cinthia y Santiago van en la misma escuela, en el mismo salón. Nunca ha pasado nada especial entre ellos... desde el primer año y los primeros meses del segundo año, Santiago no se ha fijado nunca en Cinthia, nunca se ha acercado a ella mas que para preguntar sobre la tarea o algun profesor, cosas así. Un día, la maestra de biología dejo un trabajo de equipo para revisar el parcial, no parece haber forma de saber porque, pero la maestra hizo los equipos, no dejó que se juntaran entre amigos, como los demas maestros hacen. Despues de dijo quien iba con quien, todos en el salón se cambiarón de asientos para juntarse con sus nuevos compañeros e hicieron un pequeño circulo cada equipo. Era la primera vez que Cinthia y Santiago estaban sentados juntos y también estaba Carlos, a quien ya conocía... y Mariana una chica con la que Cinthia siempre sintió alguna afinidad. Por primera vez Cinthia y Santiago platicaron lo suficiente como para que Santiago se fijara en Cinthia, pues platico mucho con ella y la hacía reír, a la vez que Carlos parecía estar más intersado esta vez en Mariana. El resto de la calse se les fue en escuchar a Mariana decir que debían hacer y como, por Cinthia eso estaba bién, en realidad le es más fácil seguir ordenes que darlas.
Mariana propuso su casa para juntarse y hacer las maquetas de tarea, alegando que en su casa hay donde trabajar agusto, además, sus padres no se molestarían, siempre han sido buena onda, o al menos, eso dijo ella...
El sabado Cinthia llegó tarde a casa de Mariana, a pesar de haberse levantado temprano para salir temprano de su casa para comprar el material que ocuparían sin embargo, su padre la entretuvo un rato, cuando al fin llegó, Mariana no dejo de dar lata y recordarselo, Carlos también lo hacia mientras le tocaba los hombros o la espalda... pero Santiago no le decia nada, el era más simpatico, por eso, Cinthia termino platicando y llevandose más con él ese día... incluso parecía interesado en ella, porque cada vez parecian estar platicando con más confianza... incluso la miraba ya de otra manera, parecia que le gustaba... pues de reojo podía ver como la miraba, en especial como la miraba cuando estaba de espaldas... quizá le gustaban sus pompis... ya antes le habían dicho que eran bonitas... y bueno, ¿eso esta bien, no? Despues de todo, es normal que a los hombres les interesen esas cosas...
Siguieron con el trabajo (pero también se la pasaron jugando, pero eso siempre pasa), mientras Cinthia empezó a acercarse a Santiago, ella tenía una forma se ser... que ella no sabía bien como explicarlo, pero a las personas parecia agradar, en especial a los hombres... ella siempre se ha llevado mejor con los hombres... Santiago le llamaba la atención por que no era feo, además de muy responsable... era alguien que te daba seguridad... pero lo importante ahora es que Santiago le ponía mucha atención, quizá si le gustaba, o solo le caia bien, por que Santiago no trataba de hacer ningun avance con ella... eso la confundió, porque si le gustara lo normal sería que ya buscara acerarse a ella... cualquiera lo haría, incluso Carlos parecia esta vez, mas interesado en Mariana, por lo que a veces la toma de la cintura o los hombros, incluso la beso en la cocina, según él, sin que nadie se diera cuenta. Cinthia envidió la suerte de Mariana, aunque envidiaba más aún a las aves...
Cuando acabaron el trabajo, cada cual tomo por su lado, menos Mariana, que ahi vivia, Carlos se fue por la derecha, Cinthia y Santiago por la izquierda, al parecer, vivian por el mismo rumbo. Cinthia se alegró. Mientras caminaban, Cinthia hizó la platica mas íntima, preguntandole que le gustaba a Santiago y mostrandose interesada ella también, aunque le llamo la atención que mientras ella tenia dos perros, a los cuales queria mucho... Santiago no tenia, no tenía, decia que si le gustaban, pero que era una responsabilidad que no era facil tener en su situación, decia que vivian en un apartamento chico, que comida, medicina y demás cosas que necesitara, sería muy caro y el no tenía dinero para eso... Cinthia creia que exageraba, por que los perros pueden comer de lo que sobre de la comida y bueno, a sus perros nunca los habian llevado al veterinario... quizá exageraba, pero era claro que si se preocuaba y era responsable, ¿no?
Se dirijieron a casa de Cinthia, Santiago se ofrecio a acompañarla hasta su casa por que dijo que vivia cerca, es probable que fuera mentira, Cinthia conocia muy bien a los muchachos del barrio, y a él nunca lo había visto por ahí pero no dijo nada, esta acción de Santiago, fue lo que la hizó pensar que él si estaba interesado en ella, solo que aún no se animaba a hacer su movimiento. Cuando llegaron a casa de Cinthia, ella le ofeció algo de tomar, no sabia que podía encontrar en el refri, pero no quería que se fuera, no todavía... volvio con dos vasos de agua de jamaica. La jamaica era de lo más usual en casa de Cinthia, porque así su madre solo tenia que echar la jamaica en un recipiente con agua y dejar que agarre sabor, ni siquiera lo hervia, como despues descubrio que hace la mayoría de las personas.
Había un gran arbol de pinguica en el espacio a modo de jardin frontal en casa de Cinthia, el cual daba mucha lata, con tanta hoja seca que habia que barrer, además, de las bolitas de pinguica que caen del arbol y ensuciaban todo el piso y dejaba ese aroma tan caracteristico, ademas que ahi se reunian seguido a tomar su padre y sus amigos, lo que no era de todo su agrado... aunque de momento, ellos se sentaron debajo de aquel arbol, lo cual no dejo de parecerle ironico a Cinthia. Siguieron platicando, mientras Cinthia seguía haciendo eso que le salia tan natural... sin embargo, Santiago, era muy lindo... pero nomás no la abrazaba, ni hacia por tocarla ya no decir besarla... ¿Qué es lo que le pasa?
Estuvieron así lo que quedaba de la tarde, Cinthia había disfrutado la convivencia con Santiago, pero al parecer Santiaga iba a necesitar una ayudita, así que Cinthia trató de hacer la platica más interesante y se mostraba interesada en lo que él decía, su sonriza, su mirada, la forma en que jugaba con su pelo, eran detalles pequeños, que de alguna forma sabía que son efetivos... sin embargo se hacia tarde y Santiago tenía que irse, pero aún no había consegido nada, si acaso dos o tres besos en la mejilla, cada que se despedían... Cinthia se preguntó: -¿Qué hacer en estos casos?
Y se le ocurrió que ella tendría que dar el primer paso.
A la cuarta despedida, Cinthia no dejó nada a la suerte, se humedeció los labios y sonrío lo más seductoramente que pudo y se acerco a besar a santiago, pero de manera nada inocente, hizo que sus labios quedaran ligeramente juntos, añadele además el arrimon de bubis que le dío... estaba segura que Santiago ya no dudaría... y así sucedió... Santiago por fin la besó, Cinthia lo siguió con la mirada todo el tiempo, estudió su reacción... hubo un momento en Cinthia vio como Santiago cruzo su mirada con la de ella, para despues, cerrarlos y entregarsele a ella en un profundo beso. Y Santiago la beso a ojos cerrados e incluso los mantuvo asi un par de segundos despues, como asimilando lo que había pasado, Cinthia supo todo esto, por que sus ojos siempre estuvieron bien abiertos...
Estaba hecho! Cinthia lo sabía, así que tomo los vasos, le dio la espalda mientras le dedico una mirada y una sonrisa que terminarón de conquistar a Santiago. Traviesa, coqueta, candida... magica. Se despidio quedando en espera de verse el lunes en la escuela y entro a su casa.
Cinthia cerró la puerta tras de si y cerró los ojos un momento, repasó los hechos y se sintió satisfecha, Santiago se habia fijado en ella y era un buen muchacho. -Quizá esta ves sea el indicado...- pensó. Se dirigío rapidamente a lavar los vasos, no sin antes poner en orden alguna cosa que no lo estuviera en la sala, papá no tardaba en llegar y no le gustaba que se desatendiera la casa. Estaba terminando de lavar los vasos cuando llegó su padre, ella se tensó cuando escucho la puerta abrirse, con sus pasos hacia la cocina, finalmente voltea a su izquierda y lo ve bajo el marco de la entrada de la cocina. Ella lo saluda nerviosa, él se acerca por detras, se agacha y le dice al oido: "así me gusta, que mi niña se porte bien haga lo que le dice su papí", mientras le acaricia las nalgas con la mano...
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